Dentro del flujo de información que nos llega diariamente a
través de las redes sociales y por los medios convencionales, como la radio y
la televisión, es posible que no tengamos la oportunidad de sopesar todas y
cada una las notas que nos lleguen, y por ello, alguna que posiblemente sea
importante se pasa sin siquiera darnos cuenta.
Y una de ellas que puede pasarse y que considero de gran
importancia, es el efecto sobre el capital humano de la llamada Revolución 4.0;
la cuarta revolución industrial; Esta nueva revolución, si tiene un
comportamiento y consecuencia al igual que las anteriores, provocará un efecto
importante sobre el ser humano en cuanto a su papel en el sector productivo,
algo en lo cual no creo estar exagerando.
En la primera Revolución, en donde apareció la agricultura,
el ser humano se convirtió en campesino y sedentario, cambio radicalmente su
modo de vida que propició la creación de las primeras aldeas ya fijas, y
también tuvo un efecto en cuanto su sociabilidad.
En la segunda Revolución, cuando apareció la máquina de
vapor, el ser humano se movió del campo a la ciudad, ya que se requería lo que después
se conoció como “mano de obra”, concepto que se gestó entre el siglo XVIII y
XIX, y que sigue estando vigente hasta nuestros días.
Estos cambios tecnológicos, propiciaron lo que conocemos
ahora con el término modelos de producción, donde la eficiencia y la
productividad se convirtieron en los paradigmas del modelo económico impuesto
por la Revolución Industrial en el siglo XIX.
Pero en los pasados 150 años el desarrollo tecnológico no se
ha detenido, ni los modelos o formas de socialización tampoco, a pesar de las
instituciones religiosas o diversas ideologías que procuran mantener un status
quo de acuerdo a sus creencias.
Es evidente que, en al menos desde fines del siglo XX hasta
la fecha, se han venido cuestionando y derribando paradigmas que se mantuvieron
vigentes por centurias; ejemplo de ello es el desarrollo de la ciencia que tuvo
su inicio desde la época de Galileo (1564-1642). Y que fue un enorme parteaguas
en cuanto a los modelos de socialización y producción.
Ahora que ya estamos en pleno siglo XXI y ya llegó la Cuarta
Revolución Industrial, si estamos maravillados y asombrados por todo lo que
puede hacer la tecnología por ejemplo en el llamado internet de las cosas; es
necesario pensar ya desde ahora que se puede hacer con todo el capital humano
que será sustituido por las máquinas, qué tipo de actividades puede hacer ahora
y podrá hacer en el futuro, que tengan una aportación social.
Y así como las anteriores revoluciones industriales
anteriores modificaron y crearon nuevos modelos de sociabilidad; con toda la
experiencia adquirida hasta ahora, el ser humano tiene la responsabilidad de
aprovechar la tecnología en su beneficio total, tanto en la generación de
riqueza como el mejorar su nivel de vida.
Creo que es necesario terminar con el modelo actual vigente
de dos tipos de humanidades en función de su propiedad o riqueza. Tenemos
solamente un planeta y pertenece a todos por igual.
Seguiremos platicando ….
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