La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las

La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las
En 1953, Howard R. Bowen definió a la Responsabilidad Social del Empresario como “…las obligaciones de los empresarios para seguir políticas, tomar decisiones o adoptar líneas de acción deseables en términos de los objetivos y valores de la sociedad”. ETICA Y SUSTENTABILIDAD: VALORES BASICOS PARA LAS EMPRESAS

30 de julio de 2009

Semana de cuatro días

Hace unos días leía en una revista científica estadounidense que gobiernos estatales y empresas están pensando seriamente en reducir los días de trabajo, laborar las 40 horas semanales en cuatro días, lo cual significa diez horas diarias de trabajo.

Esta iniciativa que ha ido adquiriendo más apoyo y que básicamente surgió a raíz de la crisis financiera que comenzara en el pasado 2008, tenía como propósito inicial el ahorro en los costos de energía en los edificios, tanto de la electricidad como de los equipos de enfriamiento o de aire acondicionado.

En donde se puso en práctica esta idea a gran escala fue desde agosto del año pasado en el estado de Utah principalmente en diversas áreas de gobierno, y el resultado ha sido positivo pero no solamente en términos de costos, sino también en muchos otros aspectos.

Uno sería el ahorro de energía en si mismo, lo cual de suyo ya es importante, pero hay otros que también han resultado significativos como el reducir la contaminación vehicular al reducirse el número de días que la gente los utiliza tanto para transportarse a su trabajo, y usarlo menos en los días no laborales,

Inclusive han calculado la reducción en la cantidad de gases contaminantes tanto en la circulación de autos como por los ya clásicos embotellamientos en sus vías de comunicación; además de utilizar menor cantidad de gasolina por ser menos días de trabajo.

Si bien estos ahorros en el aspecto económico son positivos, lo son también en la parte ecológica en cuanto al reducir la cantidad de gases contaminantes en los equipos de enfriamiento de los edificios públicos y de los autos y camiones para transportarse, siendo estos últimos aspectos no considerados en la propuesta inicial pero que ahora ya son visibles plenamente.

Pero estos efectos positivos no quedan solamente en la parte económica y de medio ambiente, sino también en la parte humana en diversos aspectos; uno de ellos es que la productividad en el trabajo no se reduce; e igualmente importante, es la posibilidad de que la gente tenga más tiempo para atender a sus familias e intereses personales, siendo por lo tanto algo conveniente para la sociedad en conjunto.

Algo que también encontraron y que ha sorprendido en este experimento a casi un año de haberse iniciado en el estado de Utah, es el incremento de labores de voluntariado y en una disminución de problemas relacionados a la salud como el stress, fatiga o cansancio, lo cual se refleja en un mayor bienestar de la población por tener más tiempo para su familia y ser más eficientes en sus labores.

Ante estos resultados obtenidos, otras ciudades comenzarán también hacer pruebas de cambio de horario, y una planta de Ford en Ohio iniciará con jornadas de diez horas diarias por cuatro días de trabajo.

Creo que estas evidencias comentadas son una muestra que el ahorro económico puede ir junto con el bienestar personal y familiar, y ayudar en la reducción de la contaminación.

Esto es una prueba más de que el mundo puede cambiar y está cambiando; terminando con paradigmas que se consideraron como verdades absolutas.

Seguiremos platicando ….

17 de julio de 2009

La separación entre empresa y sociedad

Una más de las lecciones que tenemos que aprender en este siglo XXI dentro la competitividad, la crisis y la globalización, es que el mundo ha cambiado en los aspectos sociales igual o más que todos los sorprendentes desarrollos tecnológicos que hemos visto en al menos los últimos 20 años.

Pero si bien estos avances en la tecnología son más que evidentes y han tenido su repercusión social y económica, también la forma como opera y se maneja la sociedad también han venido cambiando drásticamente; sin embargo las transformaciones en el ámbito social no se reflejan rápido en las empresas, como lo hacen las modificaciones de tipo técnico.

El ejemplo de lo antes señalado es el rol de la familia con la empresa; en una remembranza de lo que fueron las organizaciones del siglo XIX, el papel del empleado o trabajador es generalmente separado o dividido de su papel como jefe o padre de familia. Así, la persona en sus horas de trabajo debe olvidarse por completo de sus obligaciones familiares y dedicarse en cuerpo y alma a sus deberes laborales.

Además, hasta todavía una generación anterior a la actual, una regla social no escrita fue que en una familia fuera solamente el hombre el que aportara económicamente, dejando a la esposa el único y exclusivo papel de cuidar a los hijos y atender las obligaciones caseras.

Todavía si recordamos un poco, en la época de nuestros padres y abuelos, era mal visto socialmente que la mujer saliera a trabajar, lo que implicaba denigrar la masculinidad del esposo; esto como ahora lo podemos ver fácilmente ya es “historia patria”.

Ante este tipo de situaciones las empresas siguen pensando y actuando como en antaño, desde el pago menor a las mujeres solamente por su condición sexual, y apartando al hombre de sus obligaciones familiares por ser precisamente el hombre.

En este nuevo siglo, la pareja matrimonial sale a trabajar y tiene poco hijos, pero quieren dar mayor y mejor atención a esos hijos; pero por contraparte, la empresa los sigue viendo solamente como empleados, sin considerar en forma importante su vida familiar y social; a través de horarios fijos y rígidos de trabajo, o restringiendo el avance profesional de la mujer si decide embarazarse.

Aunque parezca raro, todavía hay muchas empresas que tiene una mentalidad machista y/o misógina, o que consideran el aspecto social de sus empleados como algo que no tiene nada ver con la parte laboral o productiva.

Es posible que esta sea una de las consideraciones primordiales o básicas de la Responsabilidad Social Empresarial, el no considerar a la empresa solamente como una entidad productiva en términos económicos, sino como un centro de trabajo que tiene a personas que conviven entre sí para el cumplimento de los objetivos, y que esas personas tienen otras metas y ambiciones personales además que las propiamente productivas.

En todo caso la pregunta sería: ¿Qué está haciendo la empresa para conciliar la vida labora con la vida familiar y social de su personal? Y no solamente en términos económicos, sino también en aspectos de desarrollo personal, convivencia social, familiar y hasta cívica.

La empresa no se encuentra ubicada en la luna o en otro planeta, y por lo tanto no pude permanecer ajena a lo que sucede a su medio social, aunque así nos lo han dejado ver desde hace muchos años.

Seguiremos platicando ….

7 de julio de 2009

La Responsabilidad Social no va en contra de las ganancias

El pasado 3 de julio se publicó una declaración de Jack Welch, en donde dice textualmente que: “… la actual situación económica está sacando a la luz la realidad subyacente en el sentido de que -para ponerlo francamente- la primera responsabilidad de una empresa es desempeñarse exitosamente”. Esto que dice este respetado Señor Welch me inquieta sobre lo que entiendo por Responsabilidad Social (RS).

De acuerdo a lo estudiado sobre este tema, la RS no va en contra o al margen de los objetivos económicos de la empresa, o dicho en otras palabras, no se trata de que primero se logren ganancias y después aplicar la RS; es claro y evidente que cualquier empresa debe de buscar ganancias ya que no es una institución de beneficencia, pero no a costa de su Responsabilidad Social.

Ahora bien, por enésima vez la RS no es caridad o filantropía, es tener conciencia de que todas sus acciones como organización tienen un efecto social, primero con su personal, y posteriormente con sus clientes, proveedores y medio ambiente. Por lo que no se trata de enfrentar la ganancia con la RS, sino de trabajar por medio de la RS para obtener esa ganancia buscada.

Me llamó mucho la atención lo declarado por este reconocido y afamado ahora consultor y expresidente de la General Electric, que dice que la RS no es para época de crisis, cuando por otro lado, hay muchos que argumentan que es precisamente en estos momentos difíciles cuando la RS es más necesaria, pero que implica un cambio de mentalidad en cuanto a la forma de operar la empresa.

Pone en su declaración el ejemplo del toyota híbrido que utiliza gasolina de cuatro dólares, y si la gasolina baja a dos dólares entonces el híbrido ya no es una propuesta atractiva; sin embargo creo, no se trata solamente del precio de la gasolina, sino de buscar otro tipo de combustibles que no contaminen, irse solamente por el precio de un producto sin considerar sus repercusiones ambientales y de sustentabilidad.

Es claro que nadie quiere pagar más por un producto, pero se trata de buscar precisamente que esa gasolina para los autos híbridos baje de precio en función de esa Responsabilidad Social, no es fácil, pero su búsqueda implica tener una conciencia social, y no solamente buscar la utilidad propia en forma totalmente egoísta.

Finalmente, tal vez no estamos ahora para acciones filantrópicas, pero si en momentos de buscar el éxito de las empresas de manera sustentable, compitiendo en un mercado que ofrezca bienes y servicios que no vayan en demérito de todos sus grupos de interés.

Seguiremos platicando ….