La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las

La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las
En 1953, Howard R. Bowen definió a la Responsabilidad Social del Empresario como “…las obligaciones de los empresarios para seguir políticas, tomar decisiones o adoptar líneas de acción deseables en términos de los objetivos y valores de la sociedad”. ETICA Y SUSTENTABILIDAD: VALORES BASICOS PARA LAS EMPRESAS

23 de junio de 2010

El bienestar social sujeto al mundo financiero

“De repente, crear empleo no está de moda, pero infligir dolor sí lo está. Condenar los déficits y negarse a apoyar una economía todavía convaleciente se ha convertido en la nueva tendencia en todas partes, incluido Estados Unidos, donde 52 senadores han votado en contra de ampliar la ayuda a los desempleados, a pesar de tener la tasa más alta de desempleo que ha habido desde los años treinta”.

De esta forma inicia uno de los últimos artículos publicados por el reconocido economista Paul Krugman, ganador del premio Nóbel en el 2008. En donde reflexiona sobre la forma en que están actuando principalmente los gobiernos europeos, para terminar con sus déficits fiscales.

En el afán de no sufrir un eventual castigo de los mercados financieros, los gobiernos están descuidando su principal responsabilidad social de apoyar a la sociedad en términos económicos, disminuyendo el empleo, recortando pensiones y aplicando nuevos impuestos para eliminar el déficit; siendo la austeridad el nombre del juego que ahora está de moda, siendo esto la segunda parte de la crisis financiera mundial que está prácticamente cumpliendo tres años de haberse iniciado.

Grecia, Irlanda y España son los primeros que han sido puestos en el “banquillo de los acusados” por sus déficits, y el resto de los países, principalmente los europeos, están entrando en este nuevo juego de la austeridad para evitar ser colocados en el mismo banquillo.

Y si bien Grecia de manera particular puede eventualmente ser criticada por no haber actuado responsablemente desde hace ya algunos años, en cuanto a la forma de manejar sus recursos, los otros países están siendo también inculpados por la misma razón, aunque el origen de la acusación sea diferente.

Viendo todo esto en perspectiva, con o sin razón de tal culpabilidad, lo cierto es que el mundo sigue privilegiando el cortoplacismo financiero, sin tomar en cuenta plenamente el papel que les corresponde a los gobiernos en cuanto a su función social.

Y esto no lo digo yo solamente; a mediados de este mes de junio el presidente de España Rodríguez Zapatero en un discurso al país dijo:
“Ciudadanas y ciudadanos, yo soy el presidente del gobierno, pero yo no mando”
.

En otras palabras, dijo que en el mundo de hoy un presidente de gobierno tiene algo de poder, pero sólo algo, y ese algo no es mucho. Mencionó también que por encima de su poder está el de los bancos y el mundo financiero, los medios de comunicación, las agencias de valoración económica, la Unión europea y los poderes ocultos que manejan tantos y tantos hilos del entramado mundial.

Conectando esto con lo mencionado inicialmente por Paul Krugman, nos encontramos en un mundo muy poco responsable para con sus sociedades; por lo que se necesitan de verdaderos políticos, que estén dispuestos a buscar el apoyo social para el manejo de sus economías, sin estar sujetos al beneplácito de las fuerzas financieras mundiales.

El mundo de las finanzas se ha convertido en un fin, olvidándose que es un medio para lograr el bienestar de la sociedad en general.

Tal vez está gran crisis sea el catalizador para modificar los paradigmas que han manejado al mundo, y que son precisamente los causantes de esta gran crisis en la que todavía nos encontramos.

Seguiremos platicando …

15 de junio de 2010

Una empresa responsable ante la crisis

El acercarse a sus grupos de interés e incluir la responsabilidad social en el core business de la empresa, son algunos de los aspectos esenciales que los expertos aconsejan a las empresas en los momentos actuales de crisis económica, y por consiguiente de una incertidumbre mayor a la del pasado reciente.

Estas propuestas consideran a la empresa desde una diferente perspectiva, reevaluarla, como siempre debió haber sido, una institución social que tiene como objetivo final a la sociedad, teniendo como medio las ganancias económicas.

Y no se trata de una visión filantrópica, beneficencia o caridad pública, sino de una óptica en la cual la empresa es un instrumento social que está destinada a buscar el bienestar a través de la actividad económica.

Específicamente, en lo que a sus grupos de interés se refiere, ¿cuál es la forma como se relaciona con sus empleados? ¿Los sigue considerando como recurso humano, similar a la forma como administra el resto de sus recursos productivos? o bien como ahora se viene definiendo, capital humano, que como tal, agrega valor económico a la empresa por medio de sus capacidades y conocimientos.

En la actual situación de crisis unas preguntas son: ¿existe alguna forma de diálogo con su personal en cuanto a lo que se requiere hacer para mantener la supervivencia de la empresa? O bien ¿qué compromisos está haciendo la empresa con su personal para salir lo mejor librados posibles de la actual crisis?

Tal ves para alguien las preguntas planteadas puedan parecer utópicas o ingenuas, pero su propósito es el considerar la existencia de un diálogo entre la gerencia general y el personal, y que dicha gerencia esté conciente del vital papel que tiene ese personal para la operación de la misma empresa.

Está ampliamente demostrado que el clima laboral es un aspecto clave que se refleja en la productividad, y por consiguiente en los estados financieros.

Viendo hacia el exterior de la empresa, cómo es su relación con sus proveedores: ¿los considera socios? ¿qué tanto apoyan a la empresa en precios, descuentos, plazos de pagos? Tal vez sea necesario redefinir la relación existente.

Y en cuanto al llamado core business, ¿qué tanto se considera el producto o servicio que se elabora como una aportación a la sociedad? El concepto de negocio no está reñido con la responsabilidad social.

Y algo relacionado con lo anterior es la percepción de corto y largo plazo; una verdadera empresa no es algo solamente para el futuro inmediato, sino para tener una existencia larga y duradera, y que requiere del apoyo de su personal, de sus proveedores para generar algo que sea en beneficio de la sociedad.

En resumen, la empresa no es una entidad autista, y la crisis está demostrando que requiere del apoyo social en sus diferentes vertientes para salir adelante, y en la medida que haya más empresas habrá la posibilidad de generar mayor riqueza económica y por consiguiente un mayor y mejor bienestar.

Seguiremos platicando …

7 de junio de 2010

Se termina la era del riesgo especulativo

En días pasados la Cámara de Senadores de Estados Unidos, aprobó una importante modificación legal en cuanto a la forma en que deben de operar los bancos y otras instituciones financieras, en la cual se señala expresamente que no deberán utilizar los depósitos de sus clientes en inversiones de elevado riesgo, y que solamente podrán utilizar sus propios ingresos para dicha clase inversiones.

El propósito de tal disposición es evitar el uso de los recursos ajenos para operaciones altamente especulativas, y que cuando hay ganancias estas solamente quedan en manos de los propios banqueros.

El hecho de que se tengan que poner por escrito y en forma evidente este tipo de regulaciones, hace resaltar el hecho de que antes no existían tal vez por considerarse que no eran necesarias, y que se confiaba en la actitud prudente y ética de los banqueros, a quienes se les tenía plena confianza en el manejo de las inversiones de sus clientes.

Estos acontecimientos ponen en claro nuevamente que el gran problema de la crisis financiera, tuvo mucho en su origen y desarrollo no en el mercado en sí mismo, sino la forma en que este se manejo, con una marcada ausencia de un comportamiento ético, que fue soslayado por una búsqueda insaciable de riqueza en el corto plazo.

Por lo tanto lograr la mayor riqueza posible se convirtió en el gran paradigma que enmarcaba todas las decisiones de inversión, pensando que el mercado como la gran entelequia todo lo resolvería, pagándole a cada quien en función del riesgo que se corría.

La prudencia fue calificada como insensatez y tontería, elevando a los audaces que corrían grandes riesgos como el ejemplo a seguir, convirtiéndolos en los íconos en los ambientes de negocios, tanto en el mundo de las finanzas como en el resto de los sectores productivos.

Dichos íconos eran por demás individualistas faltos de cualquier comportamiento ético y por consiguiente carentes de algún vestigio de responsabilidad social.

Con esta nueva disposición por parte del congreso estadounidense, no se les deja a los banqueros manejar los recursos de sus depositantes a su libre albedrío, sino que claramente se les dice cómo deben manejar dichos recursos; lo que en otras palabras puede interpretarse también como el fijarles en forma tajante su responsabilidad social para con sus clientes; esto es, juega y arriesga tus propios recursos, pero no los de quienes al dejarles su dinero, dieron también su confianza en la forma como los manejarían.

Estos nuevos lineamientos que si bien por ahora son únicamente para Estados Unidos, seguramente en poco tiempo permearán también a nivel internacional, iniciando así una nueva era en donde los íconos antes mencionados pasarán a la historia.

Seguiremos platicando …