Entre el crecimiento de los precios de los granos a nivel internacional, los pronunciados altibajos del precio del petróleo y su repercusión en el país, y la falta de crecimiento del Producto Interno Bruto, restringen de forma severa la aplicación de la Responsabilidad Social en México, dejándola como algo para después, o en el mejor de los casos, para ser manejada únicamente como una actividad filantrópica y como algo de mercadotecnia social.
Aunque no quieran hacerse comparaciones, es inevitable hacerlas al enterarse por medio de boletines internacionales la inmensa cantidad de actividades que se realizan en torno a la responsabilidad social en el mundo, y aquí en México, no pasa nada.
Países latinoamericanos como Chile, Argentina y Brasil, anuncian continuamente cursos, conferencias, congresos, para promover la Responsabilidad Social, así como las actividades que hacen las empresas locales, o bien las empresas internacionales como bancos, apoyando este tipo de actividades a una escala nacional.
En Estados Unidos y Europa la información que existe es inmensa y continua, y no solamente a nivel empresas, sino también de gobiernos, ya sea a una escala local o nacional.
Y desafortunadamente en México, es difícil encontrar algo de información sobre las actividades que se realizan en este sentido, y no dudo que algo se esté haciendo, ya sea en escuelas o en las mismas empresas, pero todo esto se maneja en forma muy discreta, o en algo marginal para las actividades de las propias empresas.
Mucho de lo que se está haciendo en el plano internacional es desde la perspectiva de sustentabilidad, y viendo por el lado ecológico, lo cual muestra una preocupación real por el cuidado del medio ambiente, y por lo mucho que se ha dicho sobre el cambio climático.
Pero ese mismo aspecto de sustentabilidad es visto también en términos de sobrevivencia de las propias empresas, pensando en lo que tienen que hacer para permanecer en el mercado.
En cambio por acá en México la sustentabilidad es dejada únicamente en manos del gobierno y de las cámaras de diputados y senadores, y las empresas están en una actitud reactiva para sobrevivir, pero poco pensando en términos de lo que pueden hacer ellas mismas ante el difícil entorno comentado en el primer párrafo sobre el petróleo y el precio de los granos, sin tomar en cuenta a la Responsabilidad Social como un mecanismo o herramienta de la misma sustentabilidad.
Sin querer sonar pesimista, tal vez se tarde una generación completa el que la Responsabilidad Social sea realmente considerada como una alternativa viable para la mejoría de la situación socioeconómica nacional; dejándonos a la generación actual el seguir insistiendo en las características de este modelo de gestión, pero no tendremos la posibilidad de verla actuar en plena vigencia; y menos aún mientras se mantenga el vaivén económico; ya que muchos piensan que la Responsabilidad Social es solamente para los momentos en que todo se encuentra trabajando sin problemas. Ojalá me equivoque.
Seguiremos platicando …
Empresa: Una Institución Social encargada del Desarrollo Humano, a través de la Inversión y el Trabajo
La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario