Dentro del maremagnum de malas noticias financieras de la globalizada crisis financiera, me encontré con dos buenas que pueden parecer como sacadas de un cuento o de una película de esta temporada navideña.
Sin hacer mucho ruido, hay instituciones financieras que en forma un tanto cuanto silenciosa han seguido trabajando sin tener el problema de los “credit subprime”, y por consiguiente sin tener problemas en su libros contables ni en sus llamadas “hojas de balance”.
Una de ellas y que francamente me sorprendió por que desconocía su existencia, son los bancos islámicos que se rigen por la filosofía del Corán; primordialmente y por lo que leí, sin ser experto en el tema ni mucho menos, se dice que de acuerdo a esta religión está prohibida la usura, algo que también se castiga en el cristianismo en cualquiera de sus modalidades pero no se respeta; sin embargo en dichos bancos islámicos que siguen y cumplen sus preceptos religiosos, ellos operan de manera diferente.
En las reglas islámicas de transacción se impiden tomar grandes riesgos aunque esto conlleve a un menor margen de beneficio, esto se establece inclusive en sus escuelas de jurisprudencia.
En términos prácticos, si compramos un bien dentro de las reglas islámicas, fijamos con el banco el valor del bien más una cantidad extra que se pagará también en un tiempo convenido; el banco adquiere el bien a quien se lo pagaríamos; pero, aquí está lo interesante, la cantidad extra a pagar no está sujeta a las reglas cambiantes del mercado, por lo que no hay lugar a la especulación, ya que esta se encuentra también prohibida.
En el caso de una hipoteca, se genera una sociedad entre el banco y el comprador; el banco alquila el inmueble al comprador que se convierte en inquilino, y este último le estará pagando al banco la cantidad acordada, al cubrir el monto total de la deuda la sociedad se disuelve; y más aún en el caso de que no se pague esta deuda, la casa se subasta y los beneficios se reparten entre ambos de acuerdo a su participación; esto bajo el concepto de riesgo/beneficio compartido.
Sin entrar en aspectos religiosos, creo que esta forma de trabajar puede considerarse suficientemente ético en cualquier lugar del mundo, donde la especulación y la búsqueda de una gran ganancia rápida no están consideradas, sino por el contrario, se busca apoyar a quien solicitan el apoyo financiero, algo de lo que también hablaba Adam Smith aunque en diferente forma.
Triodos Bank
Otra institución interesante en este aspecto es el Triodos Bank, un banco europeo independiente con 28 años de experiencia en banca ética y sostenible. El cual desarrolla un innovador modelo de negocio bancario basado en la transparencia, que combina la rentabilidad financiera con la rentabilidad social y medioambiental. Usando los ahorros de sus clientes para financiar iniciativas novedosas que, además de ser rentables, benefician a las personas y el medio ambiente.
Básicamente se dedica a financiar sectores como las energías renovables, la agricultura ecológica, la bioconstrucción, el turismo sostenible, el apoyo a personas con discapacidad o grupos en riesgo de exclusión social y además actividades culturales.
Creo que estos dos ejemplos son una constancia que se puede trabajar financieramente con una actitud ética y socialmente responsable.
Seguiremos platicando ...
Empresa: Una Institución Social encargada del Desarrollo Humano, a través de la Inversión y el Trabajo
La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las
24 de diciembre de 2008
17 de diciembre de 2008
¿Crisis financiera o …de Confianza?
“Considero que los gobiernos no han podido o no han querido presupuestar suficiente gasto público para restaurar la confianza e ir hacia la recuperación”, Strauss-Kahn, director-gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), publicado el 16 de Diciembre de 2008 en El Financiero de México.
“El atractivo de los fondos de renta variable podría aumentar una vez que se supere la actual crisis de confianza”, Stándar´s & Poor´s, 16 de Diciembre de 2008 en El Financiero de México
Francamente no pensaba tocar este tema de nuevo por ahora, pero al encontrarme estas dos citas mencionadas leyendo el periódico, me saltó la duda sobre cual es realmente la causa raíz de este problema que se presentó como una crisis financiera, o tal vez la pregunta correcta deba de ser: ¿la crisis financiera resultó por una verdadera falta de recursos, o esta falta de fondos se dio como consecuencia de una falta de confianza?
Con ganas de complicar la cuestión, la falta de confianza trajo la crisis financiera y esta a su vez, trajo más desconfianza y como consecuencia más crisis financiera y así sucesivamente. ¡Qué gran problema¡
La crisis financiera considero que es “relativamente fácil” solucionarla, ya que por lo que hemos visto han desfilado no se cuantos miles de millones de dólares para uno y otro lado, creo que estas inmensas cantidades de dinero ya son suficientes para restaurar el crédito, sin embargo la realidad nos dice que esto no es así.
Acabamos de ver la baja en la tasa interbancaria de la FED de Estados Unidos, lo cual nos dice en palabras llanas que el dinero prestado será prácticamente GRATIS, y aún así, parece que entre los bancos sigue prevaleciendo la desconfianza.
Y por otro lado ahora se está viendo que si alguien solicita algún crédito hipotecario en Estados Unidos, le piden todo tipo de papeles que muestren su confiabilidad, y como se dice en México, “piden hasta el acta de defunción o certificado de muerte”, para iniciar el trámite y esperar para ver si puede ser sujeto de crédito, cuando hace tan solo unos meses, con la simple presentación de la tarjeta de crédito ya le daban las llaves de una casa.
Cómo han cambiado las cosas en tan poco tiempo, y si bien antes se presentó un exceso de confianza, ahora ni con la tasa de interés a cero por ciento, se obtiene algo de confianza.
Creo entonces que la verdadera escasez o crisis financiera no es de dinero, sino de CONFIANZA, Y LO MÁS INCREÍBLE ES QUE LOS POLITICOS DE TODO EL MUNDO ESTAN PIDIENDO CONFIANZA.
Si hay alguien que tenga la menor confianza en la mayor parte del mundo creo que son los políticos, y son ahora ellos quienes a través de los grandes programas de infraestructura para el 2009, más las inmensas cantidades que están usando para apoyar a las corporaciones financieras, están buscando “COMPRAR LA CONFIANZA” de todos los ciudadanos y de todos los agentes económicos.
Viendo las cosas con optimismo, creo que el precio para comprar esa Confianza, implicará una verdadera y seria reconstrucción de todo el sistema a nivel mundial; algo que si bien puede llevarse algo de tiempo, puede servir para construir algo realmente sólido y positivo para todos los habitantes de este planeta. Espero no ser idealista.
Seguiremos platicando …
“El atractivo de los fondos de renta variable podría aumentar una vez que se supere la actual crisis de confianza”, Stándar´s & Poor´s, 16 de Diciembre de 2008 en El Financiero de México
Francamente no pensaba tocar este tema de nuevo por ahora, pero al encontrarme estas dos citas mencionadas leyendo el periódico, me saltó la duda sobre cual es realmente la causa raíz de este problema que se presentó como una crisis financiera, o tal vez la pregunta correcta deba de ser: ¿la crisis financiera resultó por una verdadera falta de recursos, o esta falta de fondos se dio como consecuencia de una falta de confianza?
Con ganas de complicar la cuestión, la falta de confianza trajo la crisis financiera y esta a su vez, trajo más desconfianza y como consecuencia más crisis financiera y así sucesivamente. ¡Qué gran problema¡
La crisis financiera considero que es “relativamente fácil” solucionarla, ya que por lo que hemos visto han desfilado no se cuantos miles de millones de dólares para uno y otro lado, creo que estas inmensas cantidades de dinero ya son suficientes para restaurar el crédito, sin embargo la realidad nos dice que esto no es así.
Acabamos de ver la baja en la tasa interbancaria de la FED de Estados Unidos, lo cual nos dice en palabras llanas que el dinero prestado será prácticamente GRATIS, y aún así, parece que entre los bancos sigue prevaleciendo la desconfianza.
Y por otro lado ahora se está viendo que si alguien solicita algún crédito hipotecario en Estados Unidos, le piden todo tipo de papeles que muestren su confiabilidad, y como se dice en México, “piden hasta el acta de defunción o certificado de muerte”, para iniciar el trámite y esperar para ver si puede ser sujeto de crédito, cuando hace tan solo unos meses, con la simple presentación de la tarjeta de crédito ya le daban las llaves de una casa.
Cómo han cambiado las cosas en tan poco tiempo, y si bien antes se presentó un exceso de confianza, ahora ni con la tasa de interés a cero por ciento, se obtiene algo de confianza.
Creo entonces que la verdadera escasez o crisis financiera no es de dinero, sino de CONFIANZA, Y LO MÁS INCREÍBLE ES QUE LOS POLITICOS DE TODO EL MUNDO ESTAN PIDIENDO CONFIANZA.
Si hay alguien que tenga la menor confianza en la mayor parte del mundo creo que son los políticos, y son ahora ellos quienes a través de los grandes programas de infraestructura para el 2009, más las inmensas cantidades que están usando para apoyar a las corporaciones financieras, están buscando “COMPRAR LA CONFIANZA” de todos los ciudadanos y de todos los agentes económicos.
Viendo las cosas con optimismo, creo que el precio para comprar esa Confianza, implicará una verdadera y seria reconstrucción de todo el sistema a nivel mundial; algo que si bien puede llevarse algo de tiempo, puede servir para construir algo realmente sólido y positivo para todos los habitantes de este planeta. Espero no ser idealista.
Seguiremos platicando …
11 de diciembre de 2008
¿Falló la Etica o el gobierno corporativo?
En las últimas semanas, al menos en México, se ha estado cuestionando mucho el papel del gobierno corporativo, en relación como se manejaron los llamados derivados por algunas empresas, y en forma similar en el resto del mundo se habla también acerca de la manera como operaron las instituciones financieras con los ya tristemente célebres “subprime credits”, sin hacerlo de manera explícita ni mucho menos difundir su existencia en las inversiones realizadas.
Todos estos acontecimientos han traído el recuerdo de lo sucedido a principios de siglo, cuando las grandes empresas Enron y Worldcom, pusieron en práctica la denominada “contabilidad creativa” y engañaron al mercado en general y también a los inversionistas en particular, con los resultados que ya todos conocemos.
Lo sucedido ahora en esta crisis pone en evidencia que la lección de los acontecimientos no fue bien aprendida, o bien, que se presentó un exceso de confianza o de buena fe entre todos los participantes en los mercados.
Si bien lo dicho hasta ahora es simplemente una recopilación de hechos, lo realmente importante de aquí en adelante es el definir tanto en México como en el mundo que se tiene que hacer para reforzar el llamado gobierno corporativo tanto en las empresas del sector financiero, como en el resto que llega a incorporar papeles de riesgo pero que no lo informa al mercado.
En este punto le “volvemos a dar la vuelta al enfoque”, y me pregunto como el título de este escrito: ¿Qué fue lo que falló? ¿la Etica en cuanto a los riesgos tomados y no informarlos? ¿O fueron más bien los lineamientos en cuanto a la forma de operar del gobierno corporativo? De ser así entonces ¿tienen que ser más explícitos y detallados dichos lineamientos para que no quede nada a la discreción de quienes tienen la dirección del gobierno corporativo?
Se que son muchas preguntas, pero la verdad es que realmente me inquieta el pensar que todo se piensa arreglar con más y más reglamentos; y además el hecho de que existan, no inhibe el que no se respeten.
Ahora bien, por otro lado no se puede impedir el riesgo como tal, ya que creo es parte consustancial a la acción de cualquier empresa sin importar el giro; ahora bien, ¿quién entonces puede definir cuánto es la cantidad de riesgo adecuado? creo que esta última pregunta no tiene respuesta.
En todo caso, creo que esto está poniendo en evidencia una forma particular de Responsabilidad Social, en el sentido de que toda empresa, y más aún las que cotizan en bolsa o tienen bonos emitidos, no pueden manejar con total discreción los recursos que están obteniendo por financiamiento, luego entonces, tienen la RESPONSABILIDAD, así con mayúsculas, de informar a sus prestamistas y al mercado en general, la manera en que están manejando dichos recursos y los RIESGOS, también con mayúsculas, que están corriendo; creo que de esta forma será el mismo mercado y no un reglamento específico, el que premiará o castigará a la Empresa.
Todos estos acontecimientos están poniendo más en claro que la autotarquía o el autismo no son ya factores componentes de la Empresa, sino que esta por muy privada que sea, tiene una responsabilidad inicial con sus accionistas, y después con quienes le otorgan algún financiamiento, informándoles de los nuevos o más elevados riesgos a los que se está exponiendo la empresa.
Creo que estamos entrando a nuevos tiempos en donde la Empresa ya no será vista como entidad aislada, las repercusiones de la crisis que estamos viviendo es una clara muestra de ello.
Seguiremos platicando
Todos estos acontecimientos han traído el recuerdo de lo sucedido a principios de siglo, cuando las grandes empresas Enron y Worldcom, pusieron en práctica la denominada “contabilidad creativa” y engañaron al mercado en general y también a los inversionistas en particular, con los resultados que ya todos conocemos.
Lo sucedido ahora en esta crisis pone en evidencia que la lección de los acontecimientos no fue bien aprendida, o bien, que se presentó un exceso de confianza o de buena fe entre todos los participantes en los mercados.
Si bien lo dicho hasta ahora es simplemente una recopilación de hechos, lo realmente importante de aquí en adelante es el definir tanto en México como en el mundo que se tiene que hacer para reforzar el llamado gobierno corporativo tanto en las empresas del sector financiero, como en el resto que llega a incorporar papeles de riesgo pero que no lo informa al mercado.
En este punto le “volvemos a dar la vuelta al enfoque”, y me pregunto como el título de este escrito: ¿Qué fue lo que falló? ¿la Etica en cuanto a los riesgos tomados y no informarlos? ¿O fueron más bien los lineamientos en cuanto a la forma de operar del gobierno corporativo? De ser así entonces ¿tienen que ser más explícitos y detallados dichos lineamientos para que no quede nada a la discreción de quienes tienen la dirección del gobierno corporativo?
Se que son muchas preguntas, pero la verdad es que realmente me inquieta el pensar que todo se piensa arreglar con más y más reglamentos; y además el hecho de que existan, no inhibe el que no se respeten.
Ahora bien, por otro lado no se puede impedir el riesgo como tal, ya que creo es parte consustancial a la acción de cualquier empresa sin importar el giro; ahora bien, ¿quién entonces puede definir cuánto es la cantidad de riesgo adecuado? creo que esta última pregunta no tiene respuesta.
En todo caso, creo que esto está poniendo en evidencia una forma particular de Responsabilidad Social, en el sentido de que toda empresa, y más aún las que cotizan en bolsa o tienen bonos emitidos, no pueden manejar con total discreción los recursos que están obteniendo por financiamiento, luego entonces, tienen la RESPONSABILIDAD, así con mayúsculas, de informar a sus prestamistas y al mercado en general, la manera en que están manejando dichos recursos y los RIESGOS, también con mayúsculas, que están corriendo; creo que de esta forma será el mismo mercado y no un reglamento específico, el que premiará o castigará a la Empresa.
Todos estos acontecimientos están poniendo más en claro que la autotarquía o el autismo no son ya factores componentes de la Empresa, sino que esta por muy privada que sea, tiene una responsabilidad inicial con sus accionistas, y después con quienes le otorgan algún financiamiento, informándoles de los nuevos o más elevados riesgos a los que se está exponiendo la empresa.
Creo que estamos entrando a nuevos tiempos en donde la Empresa ya no será vista como entidad aislada, las repercusiones de la crisis que estamos viviendo es una clara muestra de ello.
Seguiremos platicando
3 de diciembre de 2008
¿Quién es el culpable de la crisis financiera? ¿La Etica o el Mercado?
A propósito de la crisis financiera, escuchaba la explicación de un profesor de economía de una universidad estadounidense que no justificaba la intervención del gobierno para ayudar a las empresas y bancos quebrados, ya que según su tesis, la situación actual de las bolsas es una clara muestra de que el mercado está castigando o desconfiando de las empresas, pero no porque haya fallado el mercado por sí mismo, por el contrario, es una evidencia de que funciona correctamente, y la solución tiene que buscarse en otro lado.
Este argumento expresado por dicho profesor se me hizo por demás interesante, ya que si el planteamiento es correcto, la crisis actual tiene su origen en quienes se aprovecharon del mercado, utilizándolo para su beneficio propio emitiendo bonos que no tenían un verdadero respaldo, en otras palabras, esos bonos eran solamente “papeles” sin una verdadera garantía; y eso creo que se llama robo o fraude para ser más específicos.
Ese origen viene desde quienes otorgaron las hipotecas sin ningún soporte, y luego las empaquetaron para ofrecer bonos con elevados rendimientos, que al final por carecer del soporte original, se cayeron como frágiles castillos de naipes.
Creo que “mucha de la polvareda” levantada acusando al mercado de la crisis, al despejarse empieza a mostrar de manera evidente que la “mano invisible” no fue la culpable como mucho se señala, sino más bien fueron “manos muy claramente visibles”, quienes sin ninguna consideración ética pensaron en ganar mucho dinero en el corto plazo.
Y me atrevo asegurar que dichas manos visibles no actuaron con ingenuidad, sino más bien con toda la astucia de quien conoce la forma como opera el mercado, que en su esencia parte de la confianza entre los actores participantes en la oferta y la demanda, intentando estas manos obtener grandes ganancias aprovechándose de dicha confianza.
Luego entonces, las grandes sumas que se manejan para rescatar al sistema financiero a escala mundial, no serán suficientes si la desconfianza sigue imperando entre quienes participan en el mercado; un claro ejemplo de esto es la inmensa cantidad de dólares que ha comprometido el gobierno estadounidense en los pasados 45 días para resarcir las pérdidas registradas, y sin embargo, todavía el pasado lunes primero de diciembre la Bolsa de Estados Unidos registró una pérdida de más del siete por ciento, marcando otra sesión tristemente memorable en la historia de este indicador.
En este caso no creo que la pregunta adecuada sea; ¿cuánto dinero se necesita para recuperar la confianza perdida? Y esto lleva entonces a otra pregunta ¿la confianza y la honestidad tienen un valor monetario?
Tal vez la pregunta más adecuada sería: ¿QUE REALMENTE SE NECESITA QUE NO SEA DINERO PARA RECUPERAR LA CONFIANZA?
Mucho se habla de poner más controles y de que exista el riesgo de una sobre regulación y es posible que así sea; pero en todo caso, quien actúa en forma deshonesta siempre buscará la forma de evadir legal o ilegalmente todos los controles, por lo que en todo caso, estos nuevos controles o una mejor supervisión pueden servir para que el presunto defraudador le piense dos veces antes de querer hacer algo indebido.
A final de cuentas la ETICA, así en mayúsculas, es la que marca el comportamiento del Mercado, y este momento actual de crisis, puede ser el gran momento para reevaluar su papel y generar una verdadera y sólida Responsabilidad Social entre quienes participan en este cuestionado Mercado.
Seguiremos platicando …
Este argumento expresado por dicho profesor se me hizo por demás interesante, ya que si el planteamiento es correcto, la crisis actual tiene su origen en quienes se aprovecharon del mercado, utilizándolo para su beneficio propio emitiendo bonos que no tenían un verdadero respaldo, en otras palabras, esos bonos eran solamente “papeles” sin una verdadera garantía; y eso creo que se llama robo o fraude para ser más específicos.
Ese origen viene desde quienes otorgaron las hipotecas sin ningún soporte, y luego las empaquetaron para ofrecer bonos con elevados rendimientos, que al final por carecer del soporte original, se cayeron como frágiles castillos de naipes.
Creo que “mucha de la polvareda” levantada acusando al mercado de la crisis, al despejarse empieza a mostrar de manera evidente que la “mano invisible” no fue la culpable como mucho se señala, sino más bien fueron “manos muy claramente visibles”, quienes sin ninguna consideración ética pensaron en ganar mucho dinero en el corto plazo.
Y me atrevo asegurar que dichas manos visibles no actuaron con ingenuidad, sino más bien con toda la astucia de quien conoce la forma como opera el mercado, que en su esencia parte de la confianza entre los actores participantes en la oferta y la demanda, intentando estas manos obtener grandes ganancias aprovechándose de dicha confianza.
Luego entonces, las grandes sumas que se manejan para rescatar al sistema financiero a escala mundial, no serán suficientes si la desconfianza sigue imperando entre quienes participan en el mercado; un claro ejemplo de esto es la inmensa cantidad de dólares que ha comprometido el gobierno estadounidense en los pasados 45 días para resarcir las pérdidas registradas, y sin embargo, todavía el pasado lunes primero de diciembre la Bolsa de Estados Unidos registró una pérdida de más del siete por ciento, marcando otra sesión tristemente memorable en la historia de este indicador.
En este caso no creo que la pregunta adecuada sea; ¿cuánto dinero se necesita para recuperar la confianza perdida? Y esto lleva entonces a otra pregunta ¿la confianza y la honestidad tienen un valor monetario?
Tal vez la pregunta más adecuada sería: ¿QUE REALMENTE SE NECESITA QUE NO SEA DINERO PARA RECUPERAR LA CONFIANZA?
Mucho se habla de poner más controles y de que exista el riesgo de una sobre regulación y es posible que así sea; pero en todo caso, quien actúa en forma deshonesta siempre buscará la forma de evadir legal o ilegalmente todos los controles, por lo que en todo caso, estos nuevos controles o una mejor supervisión pueden servir para que el presunto defraudador le piense dos veces antes de querer hacer algo indebido.
A final de cuentas la ETICA, así en mayúsculas, es la que marca el comportamiento del Mercado, y este momento actual de crisis, puede ser el gran momento para reevaluar su papel y generar una verdadera y sólida Responsabilidad Social entre quienes participan en este cuestionado Mercado.
Seguiremos platicando …
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