En México, al igual que sucede en otros países, se ha
desarrollado una cultura en la sociedad en la que se culpa al gobierno de
muchas que suceden, pero al mismo tiempo esa misma sociedad se desentiende,
pensando que no son de su responsabilidad.
De alguna manera esa cultura de deslindarse de lo que sucede
en el ámbito social, se ha arraigado fuertemente en gran parte de la población,
considerándose algo normal el culpar al gobierno de todas las vicisitudes y de
especial manera en temas como la violencia.
No es mi interés defender al gobierno ni nada por el estilo,
estoy cierto que en una parte importante de situaciones que se viven de manera
cotidiana, el gobierno es el encargado y por consiguiente responsable de sus
consecuencias; sin embargo, la sociedad también tiene un rol que cumplir en la
vida social y económica, ya sea de una ciudad, una entidad y de un país en
términos generales.
Concretamente me refiero a que la sociedad tiene también una
responsabilidad social al igual que la tiene el gobierno. Y más aún, ese mismo
gobierno nace y surge de esa misma sociedad, no se crea de forma espontánea y autista,
su función y razón de ser es por y para la sociedad, y por lo tanto es
responsable socialmente de actuar de forma adecuada según las leyes
establecidas.
Y creo que este mismo argumento puede usarse al hablar de la
sociedad, que no puede desatenderse como antes se mencionó de los aconteceres
que se presentan en el seno de ella. Viendo esto de lo general a lo particular,
es responsable inicialmente del propio gobierno que tiene y por lo tanto no
debe, aunque lo haga de forma continua, desatenderse de lo que hagan los
gobernantes.
Al seguir con la misma línea de pensamiento, la sociedad
llevada al aspecto familiar, es responsable del comportamiento de sus miembros
tanto dentro como fuera de casa, de su relación con sus vecinos, de la manera
como se conducen sus miembros al estar dentro de un autobús o camión, en el
metro, de la forma como se comporta al ir manejando un automóvil.
En todas estas situaciones mencionadas se está conviviendo
con personas, y por este sencillo hecho se tiene de suyo una responsabilidad
social; es decir, se es responsable en la manera de cómo se convive con el
resto de los seres humanos.
Esto puede ser visto desde aspectos tan sencillos o
coloquiales como el dar “los buenos días” al llegar a ver a una persona, dar
“gracias” al recibir un servicio, hasta casos de ayudar en caso de una
necesidad inesperada de alguien que se encuentra próxima.
En suma, se tiene una responsabilidad social para lograr una
convivencia sana que genere confianza entre las personas, y no simplemente
culpar a otros de lo que sucede.
Visto todo esto a nivel de la sociedad y en su relación con
el gobierno, ambas entidades tienen una responsabilidad que en muchos casos es
compartida. Un ejemplo creo que puede ayudar a explicar mejor esta idea. La
violencia no se termina con la presencia de más policías que sería la función
del gobierno, sino también que hacen las familias y la sociedad en general para
que no se generen más delincuentes. Estoy claro que no es un problema fácil de
solucionar, pero considero que es una actuación y responsabilidad social
compartida.
Si bien es cierto que dicha violencia nunca se terminará si
puede reducirse. Hay evidencias de algunas sociedades que tienen conciencia
clara de su responsabilidad y actúan en consecuencia en beneficio de todos,
sociedad y gobierno.
Seguiremos platicando …
No hay comentarios.:
Publicar un comentario